La vivienda cuenta con un sistema de reconocimiento de voz Encender la cafetera, la lavadora, subir las persianas o poner un poco de música, todo desde el sofá. Esto es posible gracias la casa inteligente de Easy Life Nada más adentrarnos en este peculiar hogar y darle los buenos días, la casa se pone en marcha. Persianas arriba, información de la temperatura y humedad del lugar, luces encendidas y música de ambiente. La vivienda, pensada exclusivamente para personas mayores y con discapacidad, "tiene integrado un sistema de reconocimiento de voz, que permite controlar todos los sistemas de la casa", afirma Peio Arrarás, director técnico de Easy Life. A diferencia de otros sistemas de voz en domótica hechos a partir de frases hechas que el usuario debe aprenderse, Easy Life integra el diccionario de castellano para que la comunicación sea más efectiva y haya una mayor interacción entre el hombre y la máquina. Además, ya están trabajando en inglés y francés y tienen previsto, para el próximo año, integrar 43 idiomas más. Sin embargo, ésta no es la única forma de activar la casa. Una pantalla táctil también nos permite hacerlo, al igual que una botonera con distintas funcionalidades, entre otros. Desde un mando a distancia Para los amantes del ocio, la vivienda incorpora un dispositivo, con un disco duro de 500 GB, que engloba todos los aparatos multimedia habidos en el hogar. "Todo ello manejable desde un mando a distancia", señala Eduardo de la Peña, director de sistemas de Easy Life. A través de un software Media Center, se pueden ver hasta tres sistemas de TV (analógica, TDT y Digital Terrestre), además de escuchar la radio. También se pueden ojear, descargar o grabar fotografías en un CD, recibir y leer noticias a través de RSS o navegar por Internet. Además, el sistema permite llamar por teléfono, hacer videollamadas o acceder al videoportero para ver quien está llamando a nuestro hogar. "Funciona como un ordenador", enuncia Eduardo de la Peña. Romper la brecha digital Easy Life, empresa perteneciente al grupo AWA, nació hace nueve meses, con la intención de "desarrollar una tecnología acorde con los más necesitados", cuenta su director general, Amador Melero. "Trabajamos en el ámbito rural intentando romper la brecha digital", añade. Uno de los principales cometido de Easy Life es desarrollar productos que sean accesibles economicamente, por lo que según señala su director general "se puede encontrar una domótica por tan sólo 1.000, 2.000 o 3.000 euros."
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